La creciente moda de coleccionar tarjetas con fotos entre los fans de los ídolos del K-pop ha sido recientemente objeto de escrutinio.
Los padres están expresando su preocupación por esta cultura. Según los medios de comunicación, uno de ellos dijo hace poco que había tenido que comprar "cajas de latas de refrescos que ni siquiera suele beber" sólo porque sus hijos les "suplicaban" que querían la tarjeta de Wonyoung.
Anécdotas similares se pueden encontrar en plataformas en línea llamadas "cafés de padres", donde los padres se dedican a intercambiar mercancías para adquirir determinadas tarjetas fotográficas.
"Como mi hijo me ha dicho que puede recibir tarjetas con foto de la IVE si compramos pizza, he tenido que visitar tres cadenas distintas", dijo uno de los padres. Otro padre también expresó su lamento: "¿Es correcto comprar montones de latas de Coca-Cola que ni siquiera nos vamos a beber sólo para hacernos con unas cuantas photocards?".
Según un fan de 12 años, han comprado todas las bebidas y pizzas para las photocards de IVE, y les ha costado unos 200.000 won en total. "Como a los padres no les gusta gastar dinero en photocards, un amigo mío incluso trabajó a tiempo parcial sin que ellos lo supieran", dijo el fan.
Los críticos han observado una tendencia preocupante en la que las empresas de alimentación colaboran con ídolos del K-pop, utilizándolos como modelos para atraer a consumidores adolescentes. Por ejemplo, Coca-Cola y NewJeans se han asociado para ofrecer latas de edición limitada que vienen con álbumes de fotos u hojas de notas con fotos de los ídolos.
Pepsi ha adoptado un enfoque similar, ofreciendo un lote aleatorio de tres tarjetas fotográficas con cada caja de latas Pepsi Zero Azúcar. Estas tácticas de marketing incitan a los fans a consumir más productos, lo que se traduce en un aumento del gasto.
Otras colaboraciones entre grupos de chicas y cadenas de comida que ofrecen pizzas y conjuntos de pollo con descuento contribuyen aún más a la obsesión. Incluso los suplementos vitamínicos asociados a promociones de ídolos se agotan rápidamente, lo que hace necesaria una producción adicional. La demanda de tarjetas fotográficas también ha provocado un aumento de su valor en las plataformas en línea donde se intercambian artículos usados, y los precios de estas tarjetas a menudo superan el coste del producto real.
Los padres expresan colectivamente su descontento a través de las noticias, criticando a las empresas por fomentar el gasto excesivo entre los niños. "También hay muchos niños que tiran los productos alimenticios simplemente porque no los quieren, por lo que ser testigo de tales sucesos ha sido extremadamente enervante".

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